Sobre el talento y un hasta luego...
Ha pasado ya más de un mes desde que hicimos oficial nuestra última aventura gráfica "Quiero una Identidad". Quizás algunos de vosotros ya la habéis jugado y otros muchos posiblemente no lo hayáis hecho. Obviamente, os animo a todos a probarla y, por lo menos, dedicar unos cuantos minutos a intentar ser partícipes de los avatares de un robot, Max V-2000, que ya es parte de la familia de Akkad Estudios. En líneas generales, debo decir que el juego ha tenido una cierta repercusión, en gran parte, gracias a gente como Yolanda Ollodepez de BotafumeiroAG, que ha hecho todo lo posible para que "Quiero una identidad" se conozca y se extienda por la red como la pólvora. También tengo que citar a Javier Agorreta, compañero de ADAN y a David Holm que, desde Memoria Pixelada, se ha hecho eco de las aventuras de Max. Gracias a tod@s por el apoyo y la atención dedicada. Llegados a este punto os estaréis preguntando qué demonios tiene que ver el título de esta entrada con todo...